viernes, 20 de abril de 2018

A cuatro manos el concierto de la vida se toca mejor


Entrevista a Idabell Rosales y Armando Añel

Por: Yoaxis Marcheco Suárez

Pareciera que Armando Añel e Idabel se conocen de toda una vida, se vieron por primera vez en una fiesta de Camacol, cuando Idabel trabajaba en Goya, -un amigo común nos presentó- cuenta Idabel con la cara zalamera, -aunque Armando dice que me había echado el ojo desde el cunero en Maternidad de Línea, nuestro amor se consolidó en Miami. Y Armando recalca: -como refiere Idabell, ya yo la amé desde Maternidad de Línea... y luego la redescubrí aquí. Porque eso es ella siempre: un descubrimiento.
Así comienza este diálogo con una pareja que ha dedicado una considerable parte de su tiempo a trabajar por los creadores literarios independientes de la Isla, en algo que se consolida y afirma, la editorial Neo Club Ediciones, con todos sus proyectos, eventos, iniciativas y sobre todo su ardua labor de rescatar la literatura censurada por el sistema Castro comunista imperante en Cuba, un trabajo grande que trae la satisfacción de promover a los que el régimen quiere sepultar y a la vez darle a Miami un toque más de cultura y literatura.

¿Qué es Neo Club Press? 

IR- Neo Club es Armando y a la vez es nuestro hijo online. Bueno, es que Armando es hijo mío también. Es el portal digital de la compañía de servicios Neo Club LLC., una especie de periódico con mucho de revista cultural. Otra cosa es la editorial propiamente: Neo Club Ediciones.

Y la idea surge

IR- Neo Club LLC. surge cuando salgo de Goya Foods. Ya Armando trabajaba desde la casa haciendo ediciones, y formamos esa compañía en octubre del 2010. Cubre la editorial y el sitio online.

¿Cuál es el enfoque?

AA- "Está enfocado fundamentalmente en la distribución de noticias, artículos, literatura, arte y productos audiovisuales, el portal sirve de caja de resonancia a la creación independiente y privilegia una política editorial inclusiva y un periodismo interactivo que protagonizan las redes sociales". Como ves, tiene mucho de los dos: es interactivo, inclusivo e independiente. El Club de los Emancipados.

¿Cuántos libros y cuántos autores tienen ya el sello de la editorial Neo Club?

AA- Ya vamos por unos cien títulos y más de cincuenta autores.

¿Tienen prioridad los autores del interior de la Isla?

No es que tengan prioridad los autores de la Isla --en realidad publicamos a autores de varios países--, pero sí se tiene en especial consideración a aquellos que por una razón u otra son marginados, silenciados, ninguneados, castigados, reprimidos, etc., en la Isla. Tendemos un puente para que la libertad se exprese creativamente, en todas sus dimensiones.

¿Podría decirse que tienen un público dentro de Cuba?

AA. Sí existe un público, cada vez más numeroso, al que llegamos de diversas maneras. Lo más difícil es introducir libros con algún contenido político --ensayos básicamente--, pero siempre nos esforzamos por hacerlo llegar todo. Buena parte de nuestra producción se distribuye digitalmente.

¿Es el Festival Vista el producto final o terminado de Neo Club LLC.? 

IR- Vista es el resultado de una noche donde descubrí que teníamos varios libros de autores aún sin presentar, acumulados, y decidimos organizar un evento de cierta envergadura para ello. Ya había abierto Vista Larga Foundation, que en un principio se llamaba "Idabell Foundation" y me dije: "Creo que se te fueron los humos a la cabeza". Así que le cambiamos el nombre. Hablamos y coordinamos entonces con varios amigos... ya hacíamos presentaciones de libros en espacios como La Otra Esquina de Las Palabras, de Joaquín Gálvez, o Delio Photo Studio, de Delio Regueral, y nos pusimos de acuerdo con ellos y con otros más.

¿En qué consiste el Festival, o sea, se podría decir que Vista es solo literatura?

AA- Neo Club Ediciones es una herramienta al servicio del proyecto Puente a la Vista y, en general, de la cultura independiente. El Festival Vista no es un producto de Neo Club LLC. sino un proyecto de la Fundación Vista Larga, que preside Idabell Rosales; yo solo soy uno de los coordinadores de ese festival. La literatura predomina, pero el festival abarca géneros disímiles. Lo mismo disfrutamos un performace que un concierto que un debate que una proyección fílmica.

¿Y el impacto de este evento en la vida cultural de Miami?

AA- Ha venido a abrir una serie de espacios necesarios para la creación independiente y su visibilidad. Si algo caracteriza al festival, creo yo, es la espontaneidad, su carácter interactivo y dinámico. En este sentido, el festival significa libertad pero también justicia. Una manera de hacer justicia a creadores y activistas culturales que no siempre son suficientemente promocionados en la Sociedad del Disparate.

¿Para algún grupo en especial?

IR- Sobre todo para el gremio de las letras, pero en general también para las distintas expresiones creativas, es un evento muy atractivo. A pesar de que nos continuamos expandiendo a otras nacionalidades, abordamos más la temática cubana. Para mí es un constante reto.

Hablemos de la utillidad del Festival para la creación literaria independiente del interior de Cuba.

IR- Es una inyección de libertad. Estimula y promueve la independencia individual, y por tanto la responsabilidad creativa. Hemos tenido la satisfacción de presentar a autores cubanos independientes y han podido compartir sus obras con el cubano de afuera y el ciudadano del mundo en general. También en las tertulias y mini festivales que hemos ayudado a hacer dentro de Cuba, ellos presentan sus obras en casas particulares y en otros espacios independientes.

¿Existen otros eventos asociados a Neo Club Press?

IR- Neo Club Press, portal digital, es más bien el amplificador de los eventos de Neo Club Ediciones, la editorial, del Festival Vista y de otros autores y proyectos de amigos relacionados con la literatura y las artes, los cuales promocionamos ya sea en Miami, en Cuba o en otras ciudades y países.

Toquemos el tema de la amistad, el apoyo que reciben de mucha gente e instituciones.

IR- Recibimos siempre apoyo de buenos amigos, desde el emocional hasta el efectivo que nos ayuda a la renta de locales para eventos o la croquetica para el brindis o para la impresión de libros. Me gustaría mencionar a todos, si me das un chance te hago una lista, pero agradezco mucho a todos los escritores y amigos que siempre han confiado en nosotros; a Rosario Martínez, que nos ayuda mucho desinteresadamente en las redes, a mi contract manager Rafael Marrero, a mis partners, a nuestros clientes, a mi querido Carlos Alberto Montaner, a mi amigo Lincoln Díaz-Balart, que desde que nos conocen no han parado de ayudarnos; a los diarios, a los medios, a Karen Caballero, de Martí Noticias, a Daphne Rosas con sus diseños, a Manuel Gayol desde California... en fin, mucho que agradecer.

Y las ayudas no paran, tampoco los agradecimientos.

AA- Agradecimientos infinitos a nuestros amigos y colegas, desde quien abre un canal de ayuda pasando por quien promueve un evento hasta quien ajusta un micrófono, desde todos los ángulos y en todos los niveles de energía, créeme que sin ellos poco o nada fuera posible. Hay muchas maneras de apoyar. Siempre pido perdón cuando enumero o menciono porque resulta imposible --literalmente-- no cometer una injusticia y dejar a alguien fuera. Ahora mismo nuestro amigo Rafael Marrero ha abierto una página de donaciones en Gofundme a beneficio de la próxima edición del Festival Vista en la ciudad, gesto de una delicadeza inusual en estos tiempos veloces: https://www.gofundme.com/festival-vista

Y es que con esa dedicación trabajan Idabel y Armando, ambos emigraron en los 90, Idabel por una reclamación familiar que le hizo su madre quien ya era entonces ciudadana americana, según nos dice vino en menos de seis meses con su hijo mayor Antonio: -Creo que me fui de Cuba deseando lo que queremos todos cuando nos vamos, un futuro mejor, pero en ese momento lo que más me apasionaba era reencontrarme con mi madre y mi hermano. Armando por su parte salió de Cuba en circunstancias diferentes: -A finales del siglo pasado -explica-  la revista Perfiles, dirigida por el político y escritor Juan Pina, convocaba cada año un concurso de ensayos para Latinoamérica. Un concurso auspiciado por la Fundación alemana Friedrich Naumann, de corte libertario. Cuando ya llevaba varios años deseando, y a ratos intentando, salir de Cuba, conocí del concurso a través del Partido Liberal de Cuba y lo gané en la edición de 1999. Tuve suerte que el premio consistiera en una beca-seminario en Leipzig, Alemania.

¿Y Por qué salir de Cuba sin retorno?

AA- Soy medio claustrofóbico y el castrismo es claustrofobia. No puedo vivir encerrado y, cuando lo estoy, necesito saber que no hay candados, que hay una puerta o una ventana esperando ser abiertas. A esta vida se viene a hacer cosas, a moverse, a crear, a tener la experiencia abierta. Vivir bajo llave implica desperdiciar la experiencia por la que estás aquí. Un sinsentido.

¿Salió de Cuba Idabel?

IR- Nunca he salido de Cuba. Nunca quise salir de Cuba sin retorno, de hecho regresaba y regresaba a reencontrarme con mi padre y algunos amigos. Hasta el año 2007, cuando ya empecé a hacer activismo político. Me quise más la vida desde entonces.
Tras irse de la Isla Idabel, como la mayoría de los cubanos que emigran a los Estados Unidos, viajó directo a Miami y luego fue con su madre que vivía en Chicago. Armando Añel fue a Europa, primeramente Alemania y desde allí hasta Madrid, posteriormente a Inglaterra y luego a Estados Unidos a finales de 2004. La determinación de no volver al suelo natal parece contundente.

Hablando del no retorno, ¿los invade la melancolía?

IR- A veces me entran ganas de estar frente el malecón y mirar al mar mucho tiempo, como hacía antes, pero ya he superado todas esas ganas de vivir allá. Mi tierra es ésta también, que me deja ser y estar en todas partes.

O sea, ¿patria es algo más?

AA. En esto estoy con el Martí textual: Patria es humanidad, no esa cosa que pisan las plantas de la gente en Cuba. Patria es diversidad. De hecho, en la génesis del país-Cuba está lo multicultural, lo diferente retroalimentándose en su perpetuo sal pa'fuera. Cuba es un entra y sale y con eso no ha podido ni el castrismo. Tal vez precisamente por ello no extraño nada de allí, salvo a algunos familiares y amigos, porque Cuba es el mundo --un calabozo del mundo digamos, pero culturalmente el mundo, su mezcla-- y yo vivo en el mundo.

¿Qué enfrentaron en esa Cuba que dejaron?

IR. Cuando tu vecino es el mar no te enfrentas a nada. Vivía en una burbuja de fantasías frente al mar. Mi niñez en Cuba fue bastante feliz a pesar de los pesares, lo más importante era jugar con mis amigos. Y cuando no estaban, pues era maestra y le daba clases a las lozas de mi terraza. Fui enfermera, maestra y directora de carnavales, todo eso en mi infancia, qué precocidad, ¿eh?

Y Añel, tal vez recuerde sus años de estudiante. ¿Era un buen estudiante?

AA. Fui un pésimo estudiante hasta el tercer grado. A partir del cuarto mejoré mucho gracias a las clases privadas de una profesora que contrató mi abuelo "por la izquierda", porque con los profesores al uso no me entraba la matemática. Fíjate que antes de ser periodista independiente ya había sido estudiante independiente. Siempre he rechazado instintivamente la escuela --y más en el campo--, como todo lo esquemático o acartonado. En general, siempre rechacé la Cuba en la que nací y crecí. Creo que solo se salvaban las playas, y las playas, ya sabes, son patrimonio de la humanidad.

¿Y las escuelas en el campo?

AA. Sobre las escuelas en el campo te recomiendo, y a los lectores de esta entrevista, Ángeles desamparados, una novela de Rafael Vilches que retrata en alta fidelidad ese desastre. Un libro duro, profundo y sin embargo ameno.

¿Quedaron amigos, o amores de esos años en la memoria?

IR- Ayer mismo le comentaba a Armando, cuando escuchábamos a Led Zeppelin, que esas canciones me recordaban mucho a mi primer novio, que era rockero, y los pasillos de baile cómicos que hacía en las fiestas y cómo usaba los pantalones entubados...

 Pasemos a hablar de la literatura que es el centro del trabajo de ambos. ¿Cómo comenzó Armando a interesarse por las letras?

AA- Siempre leí hasta entrada la madrugada, creo que desde pre-escolar. Muchas veces amanecía leyendo. Mi primera obra "seria", un poema, lo escribí en un calabozo en el que pasé quince días tras fugarme del Servicio Militar, supongo que también de madrugada. Por esa época, tendría 17 años o poco más, por primera vez leí sistemáticamente poesía contemporánea. A poetas como Ángel Escobar, por ejemplo. Sospecho que los singulares sonetos de Escobar me empujaron a seguir escribiendo poemas. Ya antes era un empedernido lector, como he dicho, y por supuesto había pasado por Martí, Heredia y otros poetas clásicos en Cuba. En los talleres literarios de la casa de cultura de Plaza (en La Habana) me beneficié de la sabiduría de los maestros Manuel Gayol y Doribal Enriquez, así como de la compañía de muchos amigos-colegas de entonces.

¿Estudios universitarios?

AA- Mi universidad siempre ha sido la casa, la calle, la existencia misma, con una cátedra de lectura y composición autodidactas.

Y en el caso de Idabel, ¿de dónde surge la pasión por la literatura?

IR- Si te digo la verdad, no me apasiona la literatura. Mi pasión es la danza. También tengo mucho que ver con esta era digital, mi mensaje es conciso, soy muy práctica. Mi tema con la literatura primero fue a través de mi padre, a quien le fascinaba leer y trataba en cierta medida de inculcarme el amor por la lectura. Pero sin demasiado énfasis, pues sabía que yo era muy inquieta.

Cambiando de tema. ¿Se consideran cubanos que pertenecen a un exilio o a una diáspora?  
         
IR- En ese sentido me considero cubana y punto.
AA- Soy un exiliado en la diáspora. Algunas veces, el exilio atraviesa la diáspora sin tocarla. Y viceversa.

 Diferencias entre el exilio Cubano en Europa y el radicado en Estados Unidos.
IR- Conozco muy poco al exilio cubano en Europa, y de lo poco que conozco, de los amigos que tengo allí, sé que es mucho más difícil la adaptación y las facilidades para conseguir crédito o hacer una vida mejor que en los Estados Unidos. A diferencia nuestra, que llegamos acá y lo tuvimos todo. EUA es un país ciertamente de oportunidades para todo el que llega.

Si tuvieran que dividir al Exilio Cubano en general en grupos.

AA- Dividiría al exilio en dos grupos, y por supuesto estaría generalizando desconsideradamente. El exilio de las "clases vivas" --mayormente formado por profesionales homologados, empresarios, emprendedores, triunfadores, etc., piezas claves del motor de la economía cubana durante la República--, que abarcaría apróximadamente 20 años, desde 1959 hasta más o menos el episodio de El Mariel, y el exilio posrevolucionario que llega hasta hoy. En cuanto al europeo, lo veo como periferia del exilio en general, ya en sí mismo periferia, con las particularidades que son del caso (el hombre ya se sabe lo que es de las circunstancias). Curiosamente, hoy la Cuba geográfica es también periferia de lo cubano raigal (si es que existe lo cubano como acabado o concepto).

¿Tienen más derechos sobre el futuro de Cuba los que permanecen dentro de ella que los exiliados?

IR- Siento mucho por ese exilio que llegó aquí al principio, sin gota de inglés, pensando que regresaba pronto, es el exilio de mis abuelos. Soy todos los exilios, soy Cuba. Y tengo tanto derecho como el cubano que vive dentro, o el que vive en Australia, a decidir por el futuro de ella.

¿Juega un papel protagónico el exilio?

AA- Pertenezco al exilio activo, optimización de los dos exilios que te mencioné anteriormente. Y ese exilio es protagónico, decisivo, en la lucha por la libertad de Cuba. No solo por las condiciones del escenario específico de esta lucha, sino porque el exilio es tradición cubana. La dos guerras cubanas de liberación que culminaron en 1898 y 1959 respectivamente fueron concebidas, organizadas y planteadas desde el exilio. Solo que la de 1959 degeneró inmediatamente en una guerra fratricida que ya va por 60 años. Desde su nacimiento, Cuba se ha planteado en términos exiliados.

Volvamos a Neo Club Press y a la literatura. Hay una persona muy especial, muy dinámica, y de la que siempre reciben ayuda incondicional, esa es la madre de Idabell. ¿Qué significa ella para ustedes dos y para todos sus proyectos de trabajo?

IR- Mi madre ha sido muy eléctrica siempre, el apoyo con mis hijos ha sido fundamental, igual la ves con un plato de arroz con frijoles cuando estoy con mucho trabajo y no hemos podido cocinar, o ayudando en la venta de libros. En fin, es como un pulpo y con una capacidad de diversificación inmensa, tengo mucho de ella.

AA- Ella es insustituible. Un ejemplo de laboriosidad y pujanza. Un gran apoyo y una inspiración.

Armando, entre tanto editar textos ajenos, ¿qué queda para la creación literaria personal?

AA- Queda algo, como demuestra el hecho de que ya tengo una docena de libros publicados. Con tres o cuatro pendientes de revisión, en stand by.

¿Géneros en los que te sientes más cómodo?

AA- En casi todos. Salvo en el teatro, que no cultivo, me desenvuelvo cómodamente en los demás.

Al contrario de lo que muchos piensan el trabajar juntos no crea pereza en la relación de Armando e Idabel, “con toneladas de amor, humor y respeto” dice Añel es como se mantienen muy unidos y según Idabel tener proyectos en común los ayuda en la relación: “Me fascina trabajar con Armando, más cuando la mayoría de las cosas que hacemos es en conjunto. A lo largo de estos años hemos aprendido a respetar lo que hace cada cual y a estimularnos porque valoramos mucho lo que hacemos. No hay nada más bello que admirar a quien amas y hacer lo que te gusta.”

¿Y hay tiempo para la vida amorosa y familiar?

IR- Hay tiempo para todo. Mis hijos y Armando son mi vida, y mis amigos entran en ese núcleo importante de mí. Para lo que uno quiere, siempre hay tiempo. Tenemos muy buena comunicación, coordinamos y siempre estamos en contacto con quien queremos.

¿Cómo lo hacen?

AA- Protejemos nuestro tiempo familiar precisamente porque cada vez hay menos tiempo disponible. Cuando maduras, comprendes que estás obligado a potenciar el tiempo.

Hablando nuevamente de política. ¿Cuál creen sea el motivo por el que seguimos con dictadura en Cuba?

IR- Son varios factores, yo pienso que dentro y fuera estamos anestesiados por una realidad impuesta, nos han inhabilitado mentalmente y hecho creer que no podemos cambiar las cosas. Y en el caso nuestro como cubanos que vivimos fuera, Cuba nos importa mucho pero como ves ya tienes otra realidad acá con tu familia. Y así, trabajando en proyectos para la democracia en Cuba, sabes que allí tienen todo el poder y el andamiaje y nos siguen dificultando mucho lo que queremos ir cambiando. También ellos saben que nos han tenido chantajeados con el tema familiar, son muchos los millones y millones de dólares que hacemos llegar a la isla anualmente, otro factor que ayuda a mantener a la dictadura en el poder.

¿Algún motivo preponderante?

AA- Hay muchos motivos que en suma constituyen el motivo, ni siquiera siento que deba darle preponderancia a uno sobre otro. Los evidentes ya los conocemos, pero se trata de una amalgama. Yo mencionaría al nacionalismo acomplejado, que está en el origen del país, como motivo adicional y no menos importante. Y el espíritu caníbal que con tanta frecuencia emerge entre los cubanos, esa cosa cutre de "abajo todo el que suba" que alimentó el triunfo del castrismo y hoy le brinda respiración asistida.

En este mismo sentido, hace unos días ustedes tuvieron la iniciativa de hacer circular un pacto donde proponen el respeto en el debate entre los diferentes grupos opositores e individuos, dejando a un lado las ofensas, burlas, agresiones verbales. ¿Por qué la idea de este pacto? ¿Ha recibido la inciativa respuesta positiva y considerable?

AA- Un pacto de no agresión. En realidad no circuló más allá de algunos ajustes del borrador. Lo dejamos para luego entendiendo que podía enmarañar aún más el escenario en lugar de despejarlo.

¿Alguna recomendación para la Oposición interna y externa?

IR- Unámonos en el esfuerzo de liberar a los presos políticos y exigir elecciones libres y plurales y que juzguen a los criminales en Cuba. Trabajemos para educar a la nación del futuro.

¿Más estrategias en común tal vez?

AA- Habría que crear más redes entre los diversos grupos. Privilegiar la lucha contra el enemigo común, la dictadura, y trabajar en proyectos conjuntos con más frecuencia. La vida es cuestión de prioridades. Nunca ningún hombre ni organización humana alguna ha podido resolver todos sus problemas o abordar todas sus inquietudes al unísono. Siempre se impone el orden de los factores, y para comenzar se suele escoger la prioridad fundamental. Y la prioridad fundamental de una oposición anticastrista se supone que es hacer oposición anticastrista, no oposición a la oposición anticastrista.

Los presos políticos son una preocupación constante para ustedes.

AA- Lo mismo que la inmensa mayoría de los cubanos sensibles con el tema de los derechos humanos: Promovemos su liberación y denunciamos su injusto encierro, así como las condiciones que propician esta realidad carcelaria. No olvidemos que la sociedad cubana es carcelaria en primera instancia: igual que a cualquier centro penitenciario en Cuba, la caracterizan la promiscuidad, la miseria y la falta de derechos. De manera que en esa pobre isla la cárcel es la cárcel al cuadrado.

¿Cómo los apoyan?

IR- Ahora mismo trabajo en una campaña online para liberarlos. Son una prioridad.

Uno de los presos de conciencia más notorios en este momento es el doctor Eduardo Cardet. ¿Sería útil para su liberación una campaña que aglutinara a toda la oposición?

AA- Claro que sería útil. Sobre todo si lograra aglutinar un buen número de proyectos u organizaciones. Incluso más allá de su objetivo fundamental, la liberación de Cardet, podría ser una oportunidad para que la oposición de dentro y fuera de Cuba demuestre su profesionalismo y trabaje en coordinación.

IR- Estuve leyendo sobre Cardet no hace mucho. Definitivamente, una campaña y todas las campañas. Debemos aprovechar todos los espacios de denuncia. Agotar todos los recursos.

Idabel Rosales y Armando Añel trabajan con los pies puestos en el presente y con un poco de corazón en el futuro de Cuba, el talento de ambos le ha abierto las puertas del éxito y los ha convertido en eficaces promotores de la cultura y las letras, con un público ya bien establecido en Miami y uno en conquista dentro de la Isla, Neo Club Ediciones ya tendrá su lugar en la Cuba genuinamente libre de castrismo, una Isla que Idabel quisiera ver como “el sitio donde podamos intercambiar información aunque discrepemos, y podamos amplificar pensamientos sin ir a prisión, sin que nos maten” y que Añel sueña como “una isla abierta a la imaginación de todo el mundo.”

martes, 10 de abril de 2018

Carta a un amigo


Por: Yoaxis Marcheco Suárez

Me gusta como huele la tierra cuando está caliente y comienza a llover: -¿Recuerdas ese olor? - Pero ese olor no es igual en otra parte, solo en los montes de Cuba huele a maravilla. Olor a lluvia. Es rico ese olor y da sueño, también el sonido de la lluvia en los techos y en el suelo, extraño el tintineo de la lluvia, solía dormirme de niña escuchando aquel bendito sonido, me acurrucaba en mi cama y mis ojos se cerraban solos. En Cuba la lluvia se siente porque las casas son abiertas, cuando Cuba sea libre tendremos que mantener nuestra vieja costumbre de vivir con las puertas y ventanas abiertas para que entre la luz, el olor de la lluvia, de las hierbas, de la vida.

-¿Te acuerdas de los aguaceros de mayo? Tronaba y aun así nos bañábamos, mientras las madres peleaban y en vano nos llamaban a entrar. Corríamos por los charcos y nunca nos enfermábamos, éramos 'trinquetes'. Y cuando escampaba, todo quedaba quietecito, ni las hojas se movían, solo nuestras risas y las carreras de un lado para otro mientras sudábamos a mares después de habernos bañado, luego las madres de nuevo con sus benditas 'regañinas' y tanto alboroto nos costaba otro baño antes de dormir, y que fastidio, antes de dormir ya los ojos no se sostenían. Benditas madres y benditas noches de la infancia.

-¿Te acuerdas de aquellas troná de veranos? No les teníamos miedo a los truenos, de noche la luz de los relámpagos entraba por las hendijas de mi casa vieja y yo jugaba a mirarme las manos, era una luz blanca, como el flash de una cámara, así me decías: -esos no son rayos, es que nos están tirando fotos desde arriba, boba yo que te creía. Luego aprendimos en alguna película que ya no recuerdo, que para saber si la tormenta se está alejando solo hay que contar entre el sonido de un trueno y otro... uno, dos, tres, cuatro, cinco... bum... uno, dos, tres... bum. Así la pasábamos tirados en el piso del portal, el tuyo o el mío, daba igual, con toda aquella tropa de 'vejigos' del barrio, descalzos y semidesnudos por el calor, porque después de los truenos y el aguacero la humedad nos abrazaba, y se quedaba por mucho rato el retumbar lejano de los truenos. Entonces algún viejo decía: -Se está acabando el mundo por aquel lao. Me gusta el sonido de los truenos cuando se alejan. Y la tarde es entre roja y gris, después de un buen aguacero.

-¿Te acuerdas de aquella vez que nos acostamos en la hierba a mirar el cielo? Mentiroso, decías que nos podíamos despegar de la tierra y caernos, que aunque yo creyera que el cielo estaba arriba, realmente estaba abajo, que solo me salvaba si caía en una nube, vaya que era boba yo, siempre te creía. Y sí que da la sensación de que el cielo está abajo cuando lo miramos acostados bocarriba en la tierra, da la impresión de que nos podemos caer a ese vacío azul, también me gusta el cielo cuando está azul y más en cuaresma cuando el viento que viene del sur es fuerte y las nubes pasan con mucha rapidez: -Já, -me decías- si te caes ahora no hay nube que te salve.

La tierra cubana es tan benigna, no hay fieras salvajes, ni animales venenosos, puedes acostarte en ella y dormir en paz, pero si te agarran las 'santanicas' o 'santanillas' te encienden. ¿Te acuerdas aquel día que nos picaron las santanicas? Nos encendieron el cuello y debajo de los brazos, nuestras madres tuvieron que bañarnos en alcohol, vaya que son terribles esas hormiguillas rojas, algún que otro viejo del barrio nos echó un regaño: -eso es por andar tiraos por el piso, las santanicas pican como el diablo- y las viejas católicas se persignaban y a nosotros pronto se nos olvidaban las picaduras y volvíamos con la 'jauría' de muchachos del barrio a 'pataperrear’ por el campo. Pero donde sí habían muchas santanicas era en la mata de guayabas rojas de la tía Ida, eran un millón y de lejos parecían como un hilillo de candela, aun así te trepabas en la mata y cogías  las guayabas pintonas, las que a mí me gustaban, y la tía Ida venía escoba en mano a ‘azorarnos’ como si fuéramos gallinas en patio ajeno, te lanzabas de la rama donde estuvieras ‘trepado’ y salíamos disparados como flechas, nunca nos alcanzaba la tía, pero siempre daba las quejas a las madres y luego nada de ‘muñequitos’ en la television, el castigo era seguro, después de comida, las tareas y luego la cama, a dar vueltas como un trompo escuchando a los otros muchachos del barrio reír y corretear afuera hasta que el sueño llegara, al otro día todavía sentíamos ‘roña’ contra la tía Ida: -Sí que es ‘lengualarga’, me decías, pero luego cuando nos dábamos los atracones de ‘casquitos’ de guayaba y de mermelada con queso que ella muy bondadosa nos brindaba, se nos olvidaba y le échabamos las miradas más agradecidas: -ná, Ida no es mala gente, ¿verdad?- Me preguntabas y antes de que yo te respondiera decías: -En el fooooondo es muy buena gente, y te echabas una carcajada. 


¿Te acuerdas aquella tarde que me lanzaste una rana verde ‘panciblanca’? Corrí y corrí, pero eras un lince, me alcanzaste y me la tiraste, la rana cayó justo en uno de mis hombros -le tengo terror a las ranas-, estuve sin hablarte mucho tiempo, entonces un día otro niño del barrio hizo lo mismo y tú le arrebataste el animal de las manos, le diste un pescozón y le dijiste muy serio: -el único que puede lanzarle a ella una rana soy yo, y nunca más le voy a lanzar una. Ese fue el día de la reconciliación, nunca antes nos habíamos peleado.

Pero cuando sí la cosa se nos puso mala fue aquella tarde que salimos de la escuela y nos entretuvimos tomando helados, nos sentamos en aquel parque cerca de la cremería, entonces los helados cubanos eran ricos, tú chocolate con vainilla, yo fresa y a veces almendras, el cielo estaba negro, casi nadie en la calle, nos sacaron de la cremería por no sé qué asunto de un ciclón, nosotros en nuestro mundo, risas y más risas, el viento empezó a zarandear las matas y la basura empezó a volar, ya ni sabíamos la hora, y era tarde, de repente vimos a mi padre llegar con pasos largos, todo agitado, habían pasado cuatro horas después de salir de la escuela y se acercaba un ciclón, mi padre no nos habló, solo nos tomó a cada uno por una oreja y así nos llevó por un buen tramo, cuando al fin llegamos al barrio, estaban todos afuera, no entendíamos nada, a ti te dieron una ‘cintiá’ y a mí castigo por un mes, tal era el susto que le habíamos dado a todo el mundo, perdidos en un día de ciclón.

Solo espero que te acuerdes todavía de todas esas cosas, de los colores de los atardeceres, de los olores del barrio, de los viejos que ya se fueron hace rato, de nuestros dicharachos, de los locos de la calle como Seledonio, ¿te acuerdas? Decía que él era el Mesías; o ‘Caguairán’ que una vez nos corrió atrás con un palo en la mano para golpearnos y nos libramos de milagro. Porque al final esa fue mi infancia y la tuya, entonces no había política, ni intereses que nos separaran, entonces jurabas que por siempre seríamos los mejores amigos y fuimos los mejores amigos del mundo, al menos tú eres irrepetible. Eres Cuba de muchos modos, esa parte de Cuba que se llama corazón, algún día, tal vez, no habrán ideologías que nos separen, ni geografías, ni rumbos.

jueves, 5 de abril de 2018

El precio de la perreta


A los muchos Pedritos que conozco en Cuba.

Por: Yoaxis Marcheco Suárez

Pedrito es un niño bueno, recién en el mes de abril cumplió sus ocho años. Es aplicado en las materias de la escuela, educado y obediente. Su madre, una joven de solo treinta años, tiene puesto sus ojos de futuro en su pequeño Pedrito, es madre soltera y pasa las de Caín para mantener a su hijo con las cosas elementales. Desde hace un tiempo se desempeña como conserje de limpieza en un hospital. Su salario se ha incrementado, pero así y todo es insuficiente para vivir, por lo que además de limpiar pisos vende algunas chucherías que consigue por la vía del mercado negro. Los pacientes del hospital son sus principales clientes, con esto subsisten un poco y al menos no llega al punto de vender su cuerpo por las calles, como tantos otros, a quienes no juzga, pero para ella este sería el último trabajo que haría en la vida.

Gracias al empleo, pero sobre todo, a las ventas ilegales de chucherías, se puede dar con un canto en el pecho, porque a su niño no le falta nada,… bueno, casi nada. Tiene sus tenis para la escuela, el par de zapatos nuevos que solo usa para las contadas ocasiones en que puede sacarlo a pasear a casa de sus abuelos, varias camisas de uniforme y dos pantaloncitos, una mochila grande y bonita para cargar los libros, algunos shorts de mezclillas y camisetas con los Powers Rangers, sus personajes favoritos de la tele, casi todo adquirido bajo la sombra de la ilegalidad, pero nadie puede decir que su Pedrito anda mal vestido, sucio o descuidado. Sobre todo ella garantiza la comida para su hijo, lucha mucho para que de vez en cuando pueda llevarse a la boca un trozo de carne, para que no le falten los huevos y el yogurt que toma en el desayuno y en las meriendas. También de vez en vez puede comprarle algún helado Nestlé y otras confituras. Este lujo se lo puede dar muy pocas veces, pero cuando se lo da se siente satisfecha. Nadie imagina lo que le cuesta poder estimular a su hijo con estas cosillas, ver la cara de contento que pone es el mayor premio.
Quisiera pedirle más a Dios, pero está complacida, con que Pedrito tenga buena salud y crezca fuerte ya lo tiene todo. Pedrito por su parte, es un niño afortunado porque tiene una madre que lo quiere y abuelos que lo miman, y es inteligente y hasta bien parecido, todos le dicen que cuando crezca va a ser un rompe corazones, lo que la gente no sabe es que ya lo es, porque más de una niña en la escuela le ha mandado noticas de amor, claro que Pedrito todavía no piensa en estas cosas, su cabeza infantil navega en otros rumbos y como todo niño de su edad alberga un sueño, un deseo secreto que lo aleja de la realidad de vez en cuando.

La madre de Pedrito vive orgullosa de él y lo mantiene como tema principal de conversación en todas partes, en el trabajo con sus compañeras de limpieza, en la cola del pan, en la ‘botella’. Su hijo nunca le ha dado una perreta, no como la de esa niña que vio hace unos días en una tienda, que se arrastraba por el piso dando gritos pidiéndole a la madre una muñeca, la pobre mujer estaba tan avergonzada que tuvo que salir de la tienda sin comprar nada llevándose a la malcriada casi que a empujones. Pedrito no es así y ella lo tiene bien enseñado, cuando va con él a comprar siempre le advierte que no puede pedir cosas que su mamá no puede comprar y él es tan bueno que jamás abre su boca para nada.

Pero Pedrito es tan solo un niño de ocho años y tiene un sueño, un deseo que lo aleja de la realidad de vez en cuando. ¿Cómo puede Pedrito aceptar que su ilusión más importante no llegue a hacerse tangible? La madre de Pedrito debe entender que hay cosas que un niño no puede asimilar por muy bueno y educado que sea o por mucho que se le explique. Y así fue, era una de esas tardes en que luego de recogerlo en la escuela pasó por una de las tiendas recaudadoras de divisas del pueblo para comprar algunos artículos para la higiene, entraron como siempre, él amarrado de la mano de ella, mirando cada cosa con ojos desparramados, pero bien sellada la boca, todo iba bien, hasta que Pedrito divisó en el estante de los juguetes un enorme carro de bomberos de color rojo brillante, con una escalera plateada igualita a la de los carros de verdad, dentro de la cabina, dos pequeñas cabecitas simulaban a los bomberos reales con sus sombreros y todo. Disimuladamente el niño se desprendió de la mano de su madre y corrió a ver de cerca aquella belleza, sus ojos eran dos farolitos incandescentes.

La dependienta se percató de la fijeza del pequeño hacia el juguete y en un tono de gran amabilidad, haciendo uso de su mejor técnica de marketing, le preguntó: ¿Te gusta? Pedrito solo movió afirmativamente la cabeza. Mira, dijo ella, usa baterías, el carrito rueda solo y suena la sirena como los carros bomberos de verdad, fíjate en estas mangueritas, las puedes desenrollar y todo, cuéntaselo a mami y dile que esta preciosura solo cuesta quince ‘chavitos’. Desde su inocencia de segundo grado, Pedrito calculó que el número quince es bastante pequeño como para ser caro, corrió hasta donde estaba su mamá y sin medir siquiera el tono de su voz, le pidió con las manos cruzadas al nivel de su barbilla: mami, cómprame el carrito de bomberos, solamente cuesta quince pesos. La madre paralizada por la intempestiva actitud del pequeño le contestó tan bajito que a penas podía oírse a sí misma: No bebé, no son quince pesos, son quince chavitos, que equivalen a casi todo mi salario del mes, mami no tiene dinero para eso, pórtate bien como siempre lo haces. Pero Pedrito estaba decidido a no portarse bien, lo único que quería era aquel carro de bomberos, él soñaba con ser bombero cuando fuera grande. Aquella belleza tenía que ser suya. Con todas las fuerzas de sus manitos pequeñas haló a su madre hasta conseguir llevarla al estante de los juguetes y en un arranque de perreta se tiró al suelo mientras gritaba: ¡Yo quiero el carrito de bomberos! ¡Cómpramelo mami, no seas mala! ¡Cómpramelo mami, cómpramelo…!

La madre se dio perfecta cuenta de que el niño no iba a salir de su arrebato, lo tomó por uno de sus brazos, como hizo la mujer que había visto hacía unos días atrás con su hija y casi lo arrastró hasta la puerta de salida de la tienda. Ya afuera, el infante lloraba sin consuelo sin mirar a la cara de su madre. Esta quiso regañarlo, y hasta darle un coscorrón, pero en vez de eso se dejó caer desfallecida en el contén de la acera. Abrazó la cabeza de Pedrito y le dio muchos besos. Así estuvieron sentados un buen rato, tirados en el suelo, al descuido y a la vista de todos. Pedrito no podría tener su carro de bomberos ni aunque montara la perreta más grande de la historia. Entonces, con un profundo sentimiento de impotencia, la madre comprendió que a pesar de sus esfuerzos le podía dar muy poco a su niño, y que el carrito en el estante nunca estaría en las manos de Pedrito.


Perreta: Palabra que caracteriza la acción verbal compulsiva de una persona hacia otra, por molestia o caprichos. Enfado, por lo general, producido en los niños.

Los cubanos le llaman ‘pedir botella’ al autostop o al modo de viajar haciendo señas a los automóviles en la carretera.

Chavitos es la palabra que popularmente se usa en Cuba para nombrar al CUC, el peso CUbano Convertible, a veces también llamada "divisa", una moneda pensada por y para el turista/extranjero. 1 CUC equivale a 24 (a veces 25) CUP o pesos cubanos.

lunes, 2 de abril de 2018

Acostumbrados a pasar trabajo



Por: Yoaxis Marcheco Suárez



Estamos acostumbrados a pasar trabajo’, esa frase es tan cubana, como cubano es el trabajo que se pasa para todo en la Isla de los Castro comunistas. Pasar trabajo encierra muchas cosas, desde la falta de transporte público o particular -Cuba es posiblemente el país con menor cantidad y posibilidades de medios de transportación en todo el hemisferio y no dudaría que en el mundo-. La mala calidad de la alimentación y el elevado precio de los alimentos. No tener combustible para prender los ‘fogones’, porque muchas veces no es solo la ausencia de alimento, sino también con qué cocinarlos. El problema crítico de la vivienda y las condiciones de deterioro de la infraestructura pública y privada. La imposibilidad de adquirir ropas y calzado de calidad por un costo que la mayoría no puede pagar. La salud, de la que se ufana el régimen castrista, con hospitales que tienen más pinta de pocilgas que de centros médicos y donde las bacterias y gérmenes pululan a su buen gusto, gratuita, pero en realidad demasiado cara para el mísero bolsillo de los cubanos que si no ‘tocan’ con un regalito al galeno, o quien sea que deba atenderlos, la atención será demorada, indolente y de muy mala calidad. Por este mismo rumbo, la ausencia de medicamentos en las farmacias, el ineficiente sistema de urgencias carente de ambulancias y equipos para llevar la labor de primeros auxilios; y claro, imposible dejar de mencionar los salarios, ridículamente bajos, mucho espacio en los bolsillos, o ‘billeteras frías’. 

Muchas cosas se pueden enumerar que se incluyen en ese inacabable ‘pasar trabajo de los cubanos’, pero no es precisamente el que los cubanos reconozcan las dificultades innumerables que enfrentan desde que en el año 1959 llegó la desgracia a Cuba lo que más debe llamar la atención de esta popular expresión, sino el ‘estamos acostumbrados’, cuando alguien se acostumbra a una vida digna de animales, pierde de muchos modos su condición de persona, y es duro sí, lo es, pero es así, la adaptación a condiciones infrahumanas de vida, trae consigo el conformismo y el conformismo trae el inmovilismo, la ausencia de vitalidad, la pérdida de la dignidad, los sentimientos de inferioridad, las bajas pasiones, la pérdida de valores morales, se degrada la espiritualidad y como una de las consecuencias más notables: la Sociedad se transforma en una masa improductiva, mientras que la economía llega a los níveles más insignificantes. La decadencia contamina el ambiente hasta hacerse lo único notable. ¿Y quién en su sano juicio, que viva en Cuba o la haya visitado, va a negar la atmósfera de decadencia que se respira y se vive en la Isla?

Ese ha sido el mayor crimen del Castro comunismo, haber matado la condición de persona en la mayoría de los cubanos, los ha aniquilado y transformado en títeres descerebrados, sin autonomía, sin energía para luchar por sus derechos. A muchos de ellos en seres corrompidos, desmemoriados de su historia, costumbres, tradiciones, un pueblo sin raíces que lo sujete. La conformidad, la adaptación al mal, son los síntomas más terribles que indican la baja condición moral a la que el régimen de Castro ha reducido a los cubanos. Desentoxicarnos de toda esa basura nos va a costar un poco de tiempo o tal vez sea mucho más rápido y fácil de lo que imaginamos, esperemos que aún no haya muerto del todo la cepa de la que brotaba en el pasado nuestro ingenio y las bondades que siempre nos caracterizaron como pueblo.

Quienes no se acostumbran a ‘pasar trabajo’ optan en su mayoría por huir, eso ya es bien conocido, aunque muchas veces llegan al mundo libre arrastrando todos los rezagos del sistema imperante en Cuba. Muchos, pero todavía no la cantidad que se necesita, deciden oponerse de forma abierta, aun cuando esta decisión equivale a no volver a vivir en paz nunca más porque es atraer sobre sí toda la maquinaria represiva del régimen y todo el odio del totalitarismo. Si algo es cierto es que con las dos caras de la misma moneda -Fidel y Raúl- los cubanos solo hemos pasado trabajo, necesidades, estrecheces.  Pero es una total mentira, que los mismos dictadores nos han dejado sembrada en lo profundo de nuestro cerebro colectivo, que los cubanos tenemos que estar acostumbrados a pasar trabajo, a vivir sin dignidad, como animales. La verdad, por el contrario, es que en nuestras manos está revertir eso, cambiar el curso fatídico de nuestra historia, librar a Cuba de Castro para reconquistarla.

viernes, 30 de marzo de 2018

A propósito del Viernes Santo, una reconciliación en Siete Palabras



Por: Yoaxis Marcheco Suárez

"Génesis 3:15 Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar". 

La relación entre Dios y el ser humano se rompió desde los inicios de la humanidad, satanás y el pecado fueron los elementos que separaron a la criatura de su Creador, estableciendo un abismo entre ambos. La desobediencia fue el condimento que sasonó al pecado, la falta de voluntad de seguir las instrucciones divinas, la torpeza humana de creer que la plenitud de la libertad se pueden alcanzar alejados de Dios. Tras la ruptura la muerte asoló a la creación, la decadencia reina desde entonces en un mundo apartado del plan para el que fue diseñado. Vidas sin propósitos, desorientadas, un mundo de corrupción que perece. Lo que fue creado para ser eterno, llora y gime con Fuertes dolores de parto para finalmente terminar en el sepulcro. ¿Quién firmó esta sentencia? ¿Dios? Toda decisión tiene consecuencias, la libertad ha sido el elemento más justo e importante otorgado por Dios a los seres humanos, la elección de un camino a seguir es asunto nuestro, Dios no interfiere en ese particular, pero nuestras decisiones afectan a nuestro medio y a nosotros mismos, somos víctimas de nuestros propios errores y del autoengaño de creernos suficientes, cuando en realidad, nada somos.

Bien dijo Dios a Adán y a Eva que por el pecado original, la desobediencia, padeceríamos aflicción y todo lo que esta implica: trabajo para ganar el fruto de la tierra-nuestro sustento-, contradicciones entre el hombre y la mujer, falta de entendimiento entre los pobladores de la tierra -la Torre de Babel-, dolor en las preñeces, la llegada misma a la vida empieza con sufrimiento y llanto, y la siempre latente realidad de la muerte que nos asecha a cada paso, a cada bocanada de aire. Obviamente satanás inició todo este andar trágico, pero no dejamos de ser responsables hombres y mujeres, le abrimos la Puerta al pecado y la cerramos a Dios, El dejó de habitar en nuestros corazones, no porque quiso, sino porque sus criaturas así lo decidieron.

Pero según entró el mal y la muerte a nuestro mundo, así estuvo latente la esperanza: El Hijo ha sido el encargado de restaurar lo que se rompió en los inicios de la humanidad. Lo que rompimos con solo una decisión costó la sangre del Unigénito y el alto precio de rebajarse hasta lo sumo. La muerte en la cruz de Jesús no fue una más: sobre El llevó todos nuestros pecados, enfermedades, debilidades, toda nuestra dura humanidad la cargó en los brazos de esa cruz. Cada paso al Calvario fue el cumplimiento de la Antigua profecía, con sus pies ensangrentados pisó la Cabeza de la serpiente Antigua, aunque esta lo hirió en el calcañar. Molido fue por nuestras culpas, pero los clavos en sus manos y pies han sido la cumbre de su Victoria, vencida y sorbida fue la muerte, aplastada la serpiente antigua, reconciliados a través de El con Dios, pagada nuestra deuda.

El camino a la cruz fue en solitario, el Hijo marchó a la conquista de la vida solo. Sus siete expresiones antes de dar cumplimiento a su supremo objetivo dan los elementos de su propósito:

“PADRE, PERDÓNALOS PORQUE NO SABEN LO QUE HACEN” (Lc 23,34). Esta intercesión por nuestro perdón es suficiente para que el Padre lo conceda, ella es la llave de nuestra salvación, el arrepentimiento es el introducir la llave en la cerradura de la puerta que Dios nos ofrece para abrirla y encontrar la vida que solo Jesús logró para nosotros en esa batalla que inició con su muerte de cruz.

“YO TE ASEGURO: HOY ESTARÁS CONMIGO EN EL PARAÍSO” (Lc 23,43) La promesa de Cristo al ladrón arrepentido, es también para cada uno de nosotros. El conquistó la vida eterna para todo aquel que crea en su Palabra y se arrepienta. Garantizado tenemos un lugar en el Reino de los Cielos, del cual somos coherederos con El.

“MUJER, AHÍ TIENES A TU HIJO. HIJO, AHÍ TIENES A TU MADRE”  (Jn 19,26) El canal para la humanidad de Jesús fue María, mujer indiscutiblemente excepcional, solo así pudo Dios elegirla para cargar en su vientre el fruto del Espíritu Santo, pero Jesús no pertenece a María, al contrario María es de Jesús, la sensibilidad del hijo humano lo convoca a dejar a la mujer que lo trajo al mundo en manos de quien El sabía se haría cargo de ella. En todo fue ejemplo nuestro Salvador, también en este detalle.

“DIOS MÍO, DIOS MÍO, ¿POR QUÉ ME HAS ABANDONADO?” (Mt 27,36) Esta frase nos indica el misterio de la naturaleza del Jesús humillado, cien por ciento Dios, cien por ciento hombre, el Jesús que como ya decía debe sumergirse en el abismo profundo de la muerte en total soledad, en total sufrimiento. El inocente que carga sobre sí las culpas ajenas. El Hijo que siente la mordida de la serpiente en su calcañar.

“¡TENGO SED!” (Jn 19,28) Otra señal de la humanidad de Jesús, de las limitaciones de su cuerpo físico. Se hizo débil por nosotros. ¿Qué más le podemos pedir a Dios? Tengo sed, y la respuesta de aquellos por quienes había pedido perdón al Padre, de aquellos por quienes moría en ese mismo instante, fue darle de beber vinagre. Vinagre sobre sus heridas, sobre su carne lacerada, otra vez nuestro desprecio al regalo de vida del Creador.

“TODO ESTÁ CUMPLIDO”  (Jn 19,30) Todo lo que Dios tenía que hacer para nuestra reconciliación fue cumplido a través de su Hijo. Solo Jesús, sin pecado, podía lograr esa reconciliación. El pecado nos alejó de Dios, el Cordero inmolado lo venció con su sangre. Cristo ha sido el vencedor y aceptarlo a El es la decision más inteligente que los seres humanos pueden tomar. Nuestra deuda con Dios es insaldable por nosotros mismos, de nada valen los sacrificios. Solo por la sangre de Jesús nuestra deuda ha sido pagada.

“PADRE, EN TUS MANOS ENCOMIENDO MI ESPÍRITU”  (Lc 23,46) La cumbre del éxito, la paradoja divina. La muerte ha sido el triunfo de Dios y el nuestro. La muerte se hizo vida a través del expirar de Jesús. “¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón? ¿Dónde, oh sepulcro, tu victoria? ya que el aguijón de la muerte es el pecado, y el poder del pecado, la ley. Mas gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo. 1 Corintios 15:55-57.

 

Cada momento de nuestra vida es adecuado para pensar en Dios, en su propósito en nosotros, en lo que ha hecho y quiere para nuestro futuro, un futuro que excede el fin de esta vida terrena. La decisión de Adan y Eva nos apartó del Creador, pero Jesús vino para darnos vida y en abundancia. Su muerte en la cruz derrotó a satanás y puede quitar el efecto eterno de la muerte sobre ti si le abres tu corazón y le dejas entrar a morar en él. No dejes para mañana esa decisión, hoy es el día propicio para tu salvación.


A cuatro manos el concierto de la vida se toca mejor

Entrevista a Idabell Rosales y Armando Añel Por: Yoaxis Marcheco Suárez Pareciera que Armando Añel e Idabel se conocen de toda u...